Cuentos de allí y allá
El sueño del hombre gris

-Es invierno- dice el hombre gris que vivía en la habitación
gris. Yo sé que es invierno pero le digo que sí.
-Quien siembra dragones cosecha profesores de matemática-.
Contesto que sí a pesar de no comprender la lógica de mi gris compañero.
-Pienso, luego las paralelas se cortan en el infinito-. Cansado
le arrojo la tetera al hombre…
Pero la habitación gris ya no existe. Estoy en la casa de mi
abuelo, a él le arrojo el té, pero yo ya no soy yo, soy un yo niño y temo.
No quiero estar ahí. Me quiero ir. Quiero desaparecer. Él se
acerca y busco más teteras, pero se acabaron.
Trato de no gritar mucho, sino se enoja y me pega más. Y
pongo todas mis fuerzas en crear una habitación gris, y entonces viene la policía
gris y se lo lleva. Triste, floto en busca del hombre gris, pero no está, dejó
una nota:
“Los peces son rosas y la sangre es dolor”
Y suelo despertar con la cama mojada.