Por Jonathan Ilardi (@Gavroulis)
A lo mejor aquí que es invierno este álbum nos pega un poco de manera diferente. En el norte es verano, y a veces las canciones durante aquella estación tienen un tono más alegre. Bueno, eso pasa con este disco que hoy presentamos: Pythons, de Surfer Blood.
Surfer Blood - Pythons
Surfer Blood es una banda bastante aclamada en los Estados Unidos. Formados en el 2009, un año después sacarían su primer disco, Astro Coast, que contaba al momento de salir con un single bien recibido por la crítica. Desde el 2010 en adelante causaron gran revuelo en diferentes festivales con esa ópera prima, lo que los llevó a tocar junto a algunos nombres muy reconocidos del rock, como Pavement o Pixies.
El tiempo ha pasado desde ese gran debut y era hora de mostrar nuevos logros. Pythons demuestra con gusto que la banda ha pulido su capacidad creativa. Para empezar, su lugar de grabación ya no fue el dormitorio del cantante John Paul Pitts, como así sucedió con Astro Coast. Se mudaron a California, y quien produjo el disco fue Gil Norton, legendario otrora productor de Doolittle, aquél álbum de Pixies. El resultado: Canciones con voces y acordes altamente medidos y ubicados en posición justa, otorgando todos temas hiper-pegadizos. Demon Dance, Weird Shapes, I Was Wrong o Prom Song son algunos de los nombres que más resonarán en el oyente. También cabe decir que el disco tiene cierta reminiscencia noventosa. Algunos temas recordarán al Blue Album de Weezer, por ejemplo.
"I just can't be bothered" dice J.P. Pitts en Prom Song. Y esa es la sensación que mayormente propone Pythons: Un disco soleado para mantenerse alegre en todo el día y que nada tire abajo tus ánimos.
Surfer Blood - Demon Dance
